El ser humano, fue creado a imagen y semejanza de Dios. En este sentido, la identidad del hombre era muy clara: Dios (Elohim) era el Creador, el diseñador, y el hombre era la criatura, el diseño. Y Dios era un Padre, un instructor para el hombre. Además, está escrito en el evangelio según Lucas :
(Lc 3:38 [RV1960])
hijo de Enós, hijo de Set, hijo de Adán, hijo de Dios.
Adán y Eva, eran hijos de Dios por creación, y Dios era su Padre. A los ángeles también se les llama hijos de Dios en la escritura (Por ejemplo, en Job 38:7), y es por la razón de que son seres creados también.
Sin embargo, desde la caída de nuestros primeros ancestros: Adán y Eva, se ha ido perdiendo esa huella de Dios en el ser humano, y prueba de ello es la maldad acumulada en el hombre, y cómo su longevidad se ha acortado cada vez mas, etc. (Recordemos que los primeros humanos, conforme al registro de la Torá, vivieron cientos de años, casi mil, y ahora nosotros, rara vez llegamos a los cien). La dicotomía es clara, el hombre es mortal, y Dios es inmortal. El ser humano, dejó de ser hijo de Dios, y es una realidad, ¿Porqué? Porque para el hombre, Dios ya no era su Padre… escuchó la voz de la serpiente. (Génesis 3)
Ahora Satanás se convirtió en el padre del hombre, en su instructor, al poner su huella, en la creación de Dios. Este concepto de »hijos del diablo» está reflejado en muchos pasajes:
(1Jn 3:8,10 [RV1960])
El que practica el pecado es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo.
En esto se manifiestan los hijos de Dios, y los hijos del diablo: todo aquel que no hace justicia, y que no ama a su hermano, no es de Dios.
Hago una aclaración importante, antes de continuar. Cuando Adán fue creado, era »bueno en gran manera» como el resto de la Creación de Dios. Esto significa que era un reflejo de su carácter y de sus atributos, principalmente del amor que El tiene para todos. Y estaba en armonía con sus principios y sus leyes. Y de Adán emanaba de forma natural e inconsciente, el hacer lo bueno.
Ahora, una vez entendido esto, debemos saber cual es el plan de Dios para restaurar al hombre, o en otras palabras, para que este recupere su identidad perdida. El primer versículo lo encontramos justo después de la entrada del pecado en el ser humano:
(Gn 3:14,15 [RV1960])
Y YHVH Dios dijo a la serpiente: Por cuanto esto hiciste, maldita serás entre todas las bestias y entre todos los animales del campo; sobre tu pecho andarás, y polvo comerás todos los días de tu vida.
Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar.
Aqui Dios se dirige a Satanás, a través de la serpiente. Tenemos una profecía dada por El, que nos habla del plan de acción de Dios con el ser humano después de pecar. Una profecía realmente alentadora para todos nosotros, en la que promete que Satanás será aplastado finalmente. Nos habla de que habrá una guerra, una enemistad entre la mujer (Eva) y Satanás. Pero llama la atención que esta enemistad, es también entre la »simiente» de la mujer, y la »simiente» del diablo. Ahora bien, ¿Qué es una »simiente»?
La palabra que aparece en la escritura hebrea, es »zéra» . Si investigamos un poco el uso de esta palabra en la escritura (con una concordancia hebráica), podremos averiguar su significado, y la verdad que es bastante sorprendente:
1. La primera vez que aparece esta palabra, es en el primer capítulo de Be’reshit (que significa: en el principio, mas conocido comúnmente como génesis) :
(Gn 1:11 [RV1960])
Después dijo Dios: Produzca la tierra hierba verde, hierba que dé semilla; árbol de fruto que dé fruto según su género, que su semilla esté en él, sobre la tierra. Y fue así.
Sorprendente no¿? Es la misma palabra »zéra» , ya tenemos que significa semilla, que procede del fruto de un árbol. Continuemos.
2. También puede referirse a la siembra de la semilla, al tiempo de la siembra:
(Gn 8:22 [RV1960])
Mientras la tierra permanezca, no cesarán la sementera (zéra) y la siega, el frío y el calor, el verano y el invierno, y el día y la noche.
3. Puede referirse a varias semillas, o para entendernos, descendientes:
(Gn 9:9 [RV1960])
He aquí que yo establezco mi pacto con vosotros, y con vuestros descendientes (zarajem) después de vosotros;
4. Puede ser referida a un único descendiente, a una sola semilla de una persona:
(Gn 12:7)
Y apareció YHVH a Abram, y le dijo: A tu descendiente (le’zaraja) daré esta tierra. Y edificó allí un altar a YHVH, quien le había aparecido.
En algunas versiones, por razones que desconozco, no han traducido algunos de los versículos de la manera adecuada. Por eso conocer el idioma original a veces es de gran ayuda para entender los pasajes. El mismo Pablo, conocedor del idioma, nos comenta lo siguiente, respecto a lo que acabamos de citar que dice Dios a Abraham, en su epístola a los gálatas:
(Gá 3:16 [RV1960])
Ahora bien, a Abraham fueron hechas las promesas, y a su simiente. No dice: Y a las simientes, como si hablase de muchos, sino como de uno: Y a tu simiente, la cual es Cristo (el Mesías).
En griego, la palabra para semilla o simiente (que es lo mismo), es »esperma» de donde viene la palabra española: espermatozoide, que es la »semilla» que trata de fecundar o »sembrar» el óvulo femenino. Zera y esperma, son lo mismo, semilla, tanto la humana, como la vegetal. Esta semilla una vez sembrada, crece y se desarrolla, y puede replicarse o multiplicarse:
(Gn 16:10)
Le dijo también el ángel de YHVH: Multiplicaré tanto tu semilla (zarej), que no podrá ser contada a causa de la multitud.
Reflexionemos en esto. La semilla que Dios prometió a Eva, es la misma que Dios está prometiendo a Abraham. ¿Esta Dios diciendole a Abraham, que tendría muchos descendientes? No, porque está en singular, y está hablando del Mesías. No se lo que entendería Abraham, pero lo que es seguro, es que Dios nos está diciendo algo diferente.
Si dijera »descendientes» o »semillas» estaría en plural como hemos visto mas arriba.
Entonces, ¿Que quiere decir que una única semilla se multiplique?
Existe un concepto en este mundo contemporáneo, que es el de la clonación. Esto es, que a partir de una persona, de su información genética, se formen otras exactamente iguales en todos los sentidos a la primera. Hay muchas películas en las que aparece esto. No quiero decir que este sea el mismo caso, pero nos ayuda a entenderlo. El ejemplo más claro, está en el campo, en tiempos bíblicos, donde los agricultores recogían la semilla de mejor valor de una planta, y la usaban para sembrarla y cosechar el fruto, que a su vez daba lugar a mas semillas semejantes a la primera. Quedemonos con lo que he puesto en negrita. Ahora vayamos a la escritura: ¿Que quiere decir esto?
(Jn 12:23,24 [RV1960])
Jesús les respondió diciendo: Ha llegado la hora para que el Hijo del Hombre sea glorificado.
De cierto, de cierto os digo, que si el grano de trigo (semilla) no cae en la tierra y muere, queda solo; pero si muere, lleva mucho fruto.
Aqui nuestro Señor, está hablando de su muerte futura, y les dijo a los discípulos que esto era necesario, porque él era la semilla prometida, y tenía que morir para que diera mucho fruto, es decir, que surgieran muchos otros semejantes a el. Claro, un judío hoy en día, pudiera quizás entender que el concepto de simiente o semilla, puede referirse a Mashíaj. Pero ninguno entiende, que el hecho de ser semilla, implica que para dar fruto tenga que morir (tiene que ser enterrado en la tierra, y germinar o »resucitar»). Es fabuloso que nosotros tengamos acceso a este conocimiento revelado por nuestro Mesías, Yeshúa.
La promesa de la multiplicación de la semilla, en resumen, implica que muchos seres humanos serían hechos semejantes al Hijo de Dios. ¿En qué sentido? Vamos a poner varios pasajes para ello:
1. Nuestro querido Pablo, lo explica de una manera brillante en la carta a los romanos:
(Rm 5:17-19 [RV1960])
Pues si por la transgresión de uno solo reinó la muerte, mucho más reinarán en vida por uno solo, Yeshúa Ha’Mashíaj, los que reciben la abundancia de la gracia y del don de la justicia.
Así que, como por la transgresión de uno vino la condenación a todos los hombres, de la misma manera por la justicia de uno vino a todos los hombres la justificación de vida.
Porque así como por la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno, los muchos serán constituidos justos.
Poco mas se puede añadir, esta es la idea, la restauración de la imagen de Dios en el hombre, a través de uno, Yeshúa, la semilla. Y son constituidos/hechos justos, lo cual implica no meramente una justificación en la forma, sino en la esencia de cada uno, somos ahora como nuestro redentor, y como dice repetidas veces el salmo 119, nos deleitamos en hacer la voluntad de nuestro Padre, en cumplir sus instrucciones. Y vemos como este plan, abarca a todos los hombres, de manera que no hay excusa, quien quiere puede ser restaurado y sanado por Dios, y formar parte de la simiente.
2. Otro pasaje, también de Pablo:
(Rm 8:29 )
Porque a los que antes conoció, también les puso la meta/predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.
El punto aqui, es que los hombres son hechos a la imagen de Yeshúa, y además son hechos hermanos de Yeshúa, teniendo un mismo Padre.
3. Este era el deseo de David, ser hecho semejante al Hijo de Dios, en su resurrección:
(Sal 17:15 [RV1960])
En cuanto a mí, veré tu rostro en justicia; Estaré satisfecho cuando despierte a tu semejanza.
Bien, es suficiente hasta aqui lo que hemos visto. En el próximo artículo continuaremos explicando mas detalles acerca de este plan, porque aún no hemos entrado en lo mas importante, ni hemos respondido a muchos interrogantes. ¿Cómo Dios iba a efectuar o llevar a cabo este plan? ¿De qué forman parte todos los hermanos del Mesías? Y lo mas importante en estos estudios: ¿Qué era Israel en verdad y cual era su propósito? ¿Qué tiene que ver con el Mesías y sus hermanos?
Shalom.
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